Cuidados de la planta bulbosa Scilla obtusifolia o Escila |
Unas 90 especies de plantas bulbosas procedentes de Asia, África y Europa forman el género Scilla de la familia de las Liliaceae. Algunas especies de este género son: Scilla obtusifolia, Scilla peruviana, Scilla latifolia, Scilla bifolia, Scilla natalensis, Scilla italica, Scilla lanceolata, Scilla sibirica, Scilla odorata. Recibe el nombre vulgar de Escila y es una especie nativa de la parte occidental de la cuenca mediterránea. Son plantas bulbosas de bulbo casi esférico que alcanzan los 30 cm de altura en floración. Sus hojas son lineares y de un bello color verde brillante. Las flores azuladas surgen en racimos erectos con hasta 26 de dichas flores. Florecen desde finales de verano a principios de otoño. Se utilizan para formar borduras, en sotobosques claros, en rocallas y en macetas y jardineras. Son muy apropiadas para jardines costeros mediterráneos. La Escila puede vivir en una exposición de pleno sol y en una sombra ligera. Es mejor no someterlas a heladas por lo que conviene desenterrar los bulbos cuando se sequen las hojas y se guarden en un lugar oscuro y seco. Como suelo podemos emplear una mezcla, a partes iguales, de arena gruesa, tierra de jardín y compost si bien pueden prosperar en terrenos más pobres. La Scilla obtusifolia tiene buena resistencia a la sequía pero en primavera y verano agradece riegos regulares esperando a que se haya secado la tierra por completo. En otoño ir reduciendo los riegos hasta eliminarlos en invierno. Es recomendable darles un ligero abonado a base de compost o de estiércol al plantar los bulbos. La Escila no suele presentar graves problemas de plagas y enfermedades. La forma más sencilla de propagación es a partir de los bulbillos que produce la planta madre. Se siembran en primavera. |
Fotos de la planta bulbosa Scilla obtusifolia o Escila |