Cuidados del arbusto Juniperus phoenicea o Sabina negral |
El género Juniperus pertenece a la familia de las Cupressaceae y lo integran unas 60 especies de arbustos y árboles procedentes del Hemisferio Norte. Algunas especies son: Juniperus phoenicea, Juniperus communis, Juniperus oxycedrus, Juniperus osteosperma, Juniperus horizontalis, Juniperus squamata, Juniperus chinensis, Juniperus drupacea, Juniperus thurifera, Juniperus x pfitzeriana (híbrido), Juniperus brevifolia, Juniperus californica, Juniperus virginiana, Juniperus conferta. Se conoce por los nombres vulgares de Sabina negral, Sabina mora y Sabina suave. Es originaria de la cuenca mediterránea y de Madeira y las Islas Canarias. El Juniperus phoenicea es un arbusto o arbolito de crecimiento muy lento y ramificados desde la base que alcanza 5 metros de altura. Sus pequeñas hojas perennes escuamiformes se asemejan a las de los Cipreses y son de color verde grisáceo. Las flores carecen de interés ornamental. Florece a finales de invierno o a inicios de la primavera. Los frutos o gálbulas tienen una superficie brillante y son de color verdoso volviéndose rojizos con el tiempo. Esta conífera se puede utilizar para formar setos informales, en grupos arbustivos y como ejemplar aislado. Es posible cultivarlo en macetas y jardineras para patios y terrazas. Es ideal para cortavientos en jardines junto al mar. La Sabina negral prospera en exposiciones de pleno sol y de sombra ligera. Es muy resistente a las heladas, el viento y el intenso calor del verano mediterráneo. Prospera en cualquier suelo ya sea arenoso, calizo, ácido, salino, pedregoso o pobre (eso sí, bien drenado). El trasplante o la plantación conviene hacerlos en otoño. Los riegos serán moderados todo el año teniendo en cuenta que es resistente a la sequía. Esperar a que se seque bien la tierra antes de volver a aportar agua. Aunque el Juniperus phoenicea no necesita abono podemos aportar un poco de materia orgánica en otoño. Es mejor no podarlo y dejarlo a su aire pues no tolera muy bien la poda. La Sabina negral es una planta resistente a las habituales plagas pero sensible al exceso de riego. La propagación es lenta y complicada por lo que es recomendable adquirir los ejemplares en viveros, tiendas de plantas o centros de jardinería. |
Fotos del arbusto Juniperus phoenicea o Sabina negral |