Cuidados de la planta suculenta Echeveria agavoides o Echeveria |
Echeveria es un género de plantas suculentas de la familia de las Crassulaceae y lo integran unas 400 especies originarias de la zona meridional de Norteamérica, Centroamérica y la parte más septentrional de Sudamérica. Algunas especies son: Echeveria agavoides, Echeveria elegans, Echeveria glauca, Echeveria runyonii, Echeveria shaviana, Echeveria pilosa, Echeveria pulvinata, Echeveria gibbiflora, Echeveria derenbergii, Echeveria setosa. Se conoce por el nombre vulgar de Echeveria. Son pequeñas plantas suculentas sin tallo que alcanzan los 15 cm de altura. Forman bellas rosetas de hojas carnosas de color verde claro terminadas en una prominente punta. En sus tallos florales rosados aparecen flores acampanadas de color rojo con punta amarilla. Florecen desde la primavera hasta principios del verano. Se utilizan para borduras de suculentas, para rocallas, en jardines de cactus y en macetas para interior o para invernadero. Son apropiadas para jardines costeros y para grandes ciudades por su tolerancia a la contaminación. Hay que tener en cuenta que su crecimiento es más bien lento. La Echeveria agavoides prefiere una exposición de pleno sol aunque puede prosperar en una ligera sombra. No le convienen temperaturas por debajo de los 2 ºC. Como suelo serviría un sustrato comercial para cactus o una mezcla de un 75% de mantillo de hojas y un 25% de arena silícea. Los riegos serán moderados a razón de uno cada 4-5 días en los meses más calurosos e ir reduciendo hasta cada 8-10 días durante el otoño y la primavera; en invierno reducir al mínimo los riegos o suspenderlos si hace mucho frío. La Echeveria agavoides no necesita poda ni abonos. No resisten el exceso de humedad (se pudren) pero son resistentes a plagas y enfermedades. La Echeveria agavoides se propaga mediante esquejes de hojas y por separación de hijuelos. |
Fotos de la planta suculenta Echeveria agavoides o Echeveria |