Cuidados del árbol Acer obtusifolium o Arce de Siria |
Unas 160 especies de árboles y arbustos distribuidas por regiones templadas de Europa, Asia y Norteamérica forman el género Acer, de la familia de las Sapindaceae. Algunas especies de dicho género son: Acer obtusifolium, Acer campestre, Acer sempervirens, Acer negundo, Acer platanoides, Acer pseudoplatanus, Acer palmatum. Recibe los nombres vulgares de Arce de Siria o Arce oriental y los sinónimos científicos de Acer orientale y Acer syriacum. Es una especie originaria de la parte oriental de la cuenca mediterránea. Son arbustos o pequeños árboles de corteza lisa y porte algo piramidal que no suelen superar los 8 metros de altura. Presenta hojas coriáceas, de color verde lustroso y forma trilobada (tres lóbulos). Las flores son de color amarillo verdoso pero no revisten interés ornamental. Florecen a finales del invierno. Los frutos son pequeñas sámaras de unos 2 cm de longitud. Aunque su uso no está muy extendido se pueden emplear como ejemplares aislados o para formar pantallas y setos informales. El Arce de Siria prefiere una exposición de pleno sol y es resistente al calor intenso y a las heladas aunque si son persistentes puede perder las hojas y rebrotar a finales de invierno. No son nada exigentes con el suelo pudiendo prosperar en todos excepto en los salinos. Resisten bien la sequía por lo que se regarán de forma más bien moderada esperando a que se haya secado la tierra. El Arce oriental sólo se poda para eliminar ramas viejas o dañadas a finales del invierno cuando haya pasado el peligro de heladas. A pesar de que el abono no es estrictamente necesario se les puede añadir algo de materia orgánica en otoño. Son resistentes a las típicas plagas del jardín pero pueden ser atacados por hongos si hay un exceso de humedad. El Arce de Siria se puede propagar fácilmente a partir de semillas sembradas en primavera. |
Fotos del árbol Acer obtusifolium o Arce de Siria |