Cuidados de la planta Dracunculus vulgaris, Dragontea o Dragoncillo |
El género Dracunculus se integra en la familia de las Aráceas y está formado por 2 especies de plantas rizomatosas: Dracunculus vulgaris, originaria de la cuenca mediterránea, y Dracunculus canariensis, originaria de las Islas Canarias. Se conoce también por los nombres vulgares de Dragontea, Dragoncillo, flor del lagarto, hierba culebrera, dragonera y serpentaria. Estas plantas herbáceas rizomatosas presentan un tallo atigrado en colores blanco-crema y verde muy oscuro. Las curiosas hojas se dividen en un lóbulo central indiviso y otros 2 lóbulos laterales alargados. La impresionante flor es parecida a las del género Arum pero de color verde en el exterior y granate en el interior; su tamaño puede alcanzar los 40 cm de largo y hay que tener en cuenta que produce un olor desagradable que atrae a las moscas. Se puede utilizar para formar macizos verdes en zonas frescas del jardín e incluso en macetas profundas para decorar la terraza. La Dragontea necesita una exposición a pleno sol o en sombra ligera y son capaces de resistir alguna helada esporádica y de baja intensidad. El suelo para estas plantas puede ser una tierra de jardín normal, profunda, rica en humus y bien drenada. En caso de trasplante se hará en otoño. Regar de forma abundante pero dejando que se seque la tierra entre riegos unos 2 días y aumentar algo el aporte de agua durante el verano. Si hemos preparado el suelo con abundante humus no necesitarán abonados adicionales. A veces pueden ser atacadas por hongos que pudren el rizoma y provocan marchitamiento de las hojas. El Dracunculus vulgaris puede multiplicarse por división del rizoma durante el invierno. |
Fotos de la planta Dracunculus vulgaris, Dragontea o Dragoncillo |